Hielo viral para tu rostro y cuerpo La tendencia que divide a los expertos.
En TikTok e Instagram, hay una práctica que ha ganado millones de vistas: meter la cara en un recipiente con agua y hielo. Se le conoce como ice facial, y aunque suene extremo, figuras como Cindy Crawford, Irina Shayk e incluso el legendario Paul Newman lo han hecho. ¿Moda pasajera o ritual de belleza con beneficios reales?.
El objetivo, dicen quienes lo practican, es combatir la inflamación del rostro, reducir las bolsas, cerrar poros, y aportar una apariencia más luminosa y tersa. El frío ha sido parte de rituales de belleza durante décadas, y su uso no es nuevo: existen tratamientos de crioterapia, rodillos de jade e incluso ice balls diseñados para masajear el rostro.
Pero, ¿qué opinan los expertos? Según Estrella Pujol, del centro Oxigen, el frío sí ayuda a descongestionar y calmar la piel, siempre y cuando se aplique de manera segura y en una piel sana. El problema es que el hielo directo puede causar más daño que beneficio: enrojecimiento, sensibilidad extrema o incluso quemaduras por frío.
Paloma Borregón, dermatóloga del GEDET y directora de la Clínica Kalosia, advierte que no hay evidencia científica que respalde beneficios estéticos al aplicar hielo directamente sobre la piel. Recomienda, en cambio, aplicar frío de forma controlada: con utensilios refrigerados, paños o dispositivos diseñados específicamente.
La recomendación general es clara: si vas a usar hielo, hazlo con precaución. Y si lo que buscas es frescura, descanso y relajación en el rostro, hay formas más seguras de lograrlo sin riesgos.
En Hielo Franca, nos apasiona el poder transformador del hielo. Más allá de enfriar bebidas, el hielo puede formar parte de experiencias únicas: desde eventos hasta rutinas de bienestar. Ya sea en cubo, rolito, bloque o molido, nuestro hielo es de alta calidad y grado alimenticio, y está elaborado bajo estrictas medidas sanitarias.
¿Moda o método eficaz? Tú decides. Pero si algo nos enseña esta tendencia es que el hielo, aunque cotidiano, puede tener más usos de los que imaginamos.